La administración judicial online coadyuva a la transparencia y corresponde a los abogados adaptarse a los cambios tecnológicos que instaura la judicatura, revela el especialista Fernando Rodriguez Angobaldo en la presente entrevista.
En esa línea, la reducción de la corrupción se evidenciará a partir de que tendremos una justicia virtual. No habrá la necesidad de acudir al PJ para asistir a una audiencia o para una entrevista con un juez. Todo será virtual y además la presentación de escritos será mediante una mesa de partes electrónica que brinda seguridad, con lo cual no habrá espacios para la corrupción. El reto del PJ es tener el presupuesto y advertir si los cambios funcionan.
–¿Cómo saber si funcionan los cambios?
–Al ver el nivel de productividad con las plataformas virtuales y comparándolo con la productividad antes de optar por este cambio. El Consejo Ejecutivo del PJ ya emitió la Resolución Administrativa Nº 000157-2020-CE-PJ, la cual señala que el protocolo que empezará a regir desde el 17 de junio, por lo que los plazos procesales se mantienen suspendidos hasta el 30 de junio. Por lo tanto, en términos prácticos, las labores empezarían el 1 de julio. Esto es positivo porque era algo que los justiciables estábamos esperando. Es inevitable que este año el servicio de justicia perderá seis meses aproximadamente, pero creemos que en el 2021 habrá plazos más céleres y mayor productividad.
–¿Considera que la implementación del expediente judicial electrónico (EJE) ha contribuido a que el PJ dé este paso hacia la justicia digital?
–Ha sido la herramienta clave juntamente con el servicio de notificaciones electrónicas, con la casilla electrónica y con la mesa de partes electrónica.
-¿El impacto generado por el covid-19 también ha sido decisivo en este cambio?
–Así es. De los 3 millones de expedientes judiciales, 130,000 estaban digitalizados mediante el EJE. El Poder Judicial en dos meses ha emitido normas administrativas que abrieron la posibilidad de digitalizar todos los expedientes. Así, a partir de un estado de necesidad generado por el covid-19 ha avanzado en materia virtual o electrónica, como si lo hubiese hecho durante cuatro años.
Reto de los abogados
–¿Cuál es el reto de los abogados litigantes?
–Hoy, los abogados litigantes en el país tienen casillas electrónicas y se les notifica resoluciones mediante ellas. Los escritos se presentarán por medio de una mesa de partes virtual y la excepción será presentarlos físicamente. Así que el abogado debe adaptarse indefectiblemente a los cambios que se están haciendo en el PJ.
–¿Cuál es el papel de los colegios de abogados?
–Deben capacitar a los abogados en todo lo que son protocolos, para que se adapten a las nuevas tecnologías. Además, deben capacitarlos para que desarrollen habilidades que les permitan desenvolverse en una audiencia virtual, que no es como una audiencia presencial. Por tanto, el papel de estas instituciones consiste en apoyar a que los cambios que se realizan en el PJ se concreten lo más pronto posible. Tenemos que adaptarnos. Estos cambios hacia una justicia virtual son positivos. Tenemos la suerte de haber tenido los cimientos tecnológicos para ello desde el 2017.
El Ministerio Público (MP) está conectado de una u otra manera con el PJ para que el servicio de justicia sea alineado, considerando que la Fiscalía tiene planes piloto vinculados a despachos y mesas de partes virtuales, indicó Rodríguez Angobaldo.
El PJ trabaja también de manera coordinada con la Superintendencia Nacional de Registros Públicos (Sunarp) en materia de embargos electrónicos, agregó el experto, que labora como socio y managing partner del Estudio Rodríguez Angobaldo Abogados.
