Ante situaciones tan difíciles como la actual que pueden ocurrir en cualquier momento como consecuencia de eventos ajenos al control de los empresarios resulta clave que las empresas prioricen la liquidez, se anticipen a dificultades que la afecten o reaccionen lo antes posible.
Así lo reveló el experto en reestructuración empresarial Ives Huaytán, atendiendo a que esto es un proceso de replanteo y realineamiento de las principales actividades que permiten a toda compañía ser viable en el tiempo, con particular concentración en gestión de adquisición de insumos y materias primas, políticas comerciales, de crédito, tesorería y financiamiento.
Planteamientos
Ante ello, Huaytán sugirió cinco medidas para gestionar que este proceso de reestructuración sea oportuno y exitoso.
En primer lugar, revisar la estrategia del negocio, enfocándola hacia el sostenimiento de la empresa en el corto plazo para redirigir sus actividades de largo plazo de manera sostenible.
A continuación, optimizar el portafolio de la empresa, vale decir, concentrarse únicamente en las actividades rentables y en aquellas que representan la principal fuente de ingresos y beneficio.
Luego, buscar la eficiencia operativa mejorando todos los procesos posibles. “Hay que reducir gastos y desperdicios, revisar la estructura de costos, renegociar términos con los proveedores, con los acreedores bancarios, buscando más el largo plazo y ofertas de materias primas e insumos”, afirmó el experto.
Como cuarta medida, recomendó realinear la organización a la nueva normalidad. “Todas las posiciones redundantes en la organización deben ser eliminadas o cambiadas a funciones nuevas como lo han hecho varias empresas que se han reconvertido”, explicó.
Consideró, entonces, que se debe adaptar la organización a las nuevas líneas de negocio, impulsando la gestión digital con enfoque en data analytics respecto de los clientes y sus preferencias.
Por último, sugirió considerar alguna adquisición o asociación que permita ampliar la base de clientes compartiendo el riesgo con algún competidor.
En todo caso, incorporar uno o más nuevos accionistas que aporten capital que reduzca la dependencia de financiamientos externos. “Esto es un set de medidas que hay que hacer en esta coyuntura”, indicó el experto que se desempeña como director de reestructuraciones financieras en Reestructure.
Etapas
En la medida en que la coyuntura hace que los accionistas y los equipos gerenciales estén absorbidos y desbordados, en algunos casos se requiere una solución de cuatro pasos. “El primero es hacer un diagnóstico de la situación y de las ideas que deben ejecutarse para reestructurar la compañía; el segundo, implementar esa solución; el tercero, llegar a una fase de recuperación y crecimiento de la empresa; y el cuarto, estructurar el financiamiento”, indicó Huaytán.
Fuente: El Peruano
