La exministra de Salud Pilar Mazzetti se vacunó a mediados de enero de este año y recibió la segunda dosis el 6 de febrero en las instalaciones de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH), según fuentes del programa de ensayos clínicos de Sinopharm consultadas por El Comercio. Mazzetti fue inoculada con las vacunas de Sinopharm antes de la llegada del primer lote de de vacunas contra el COVID-19, que ocurrió el 7 febrero último.
Este Diario pudo confirmar que ella junto a la excanciller Elizabeth Astete y al expresidente Martín Vizcarra son parte de los 75 funcionarios públicos -del Ministerio de Salud y de la cancillería- que ya han recibido la vacuna.
Días después de la llegada del primer lote de Sinopharm, a pesar de que ya había sido inoculada contra el coronavirus, Pilar Mazzeti aseguró públicamente que sería “la última” en hacerlo. “Teóricamente me estaría tocando recién la próxima semana, pero como corresponde, como dicen, el capitán es el último que abandona el barco. Una vez que todas las personas que trabajan en el sistema estén vacunadas, recién será nuestro momento, como debe ser”, manifestó.
Otras fuentes consultadas indicaron que este hecho habría sido la razón por la que renunció al Ministerio de Salud el viernes último, luego del escándalo que se generó con la confirmación de que Vizcarra y su esposa Maribel Díaz Cabello habían sido vacunados el año pasado.
Consultado sobre la vacunación de Mazzetti, el médico Germán Málaga, investigador principal de la Universidad Peruana Cayetano Heredia y jefe del programa de ensayos clínicos de las vacunas Sinopharm, respondió a este Diario que no podía revelar esa información. “No puedo afirmar ni negar lo que me dice porque no estoy al tanto de esa información”, dijo.
Este Diario intentó comunicarse con la exministra a través de su asesora de prensa, quien recibió el pedido de descargo. Hasta el cierre de este informe no hubo una respuesta.
La distribución
En entrevista con este Diario, Málaga también detalló cómo fue la distribución de las 3.200 vacunas que recibieron procedentes de China. Según explicó, 1.200 fueron para la embajada del país asiático. Las otras 2.000 dosis fueron para la UPCH, quienes recibieron el encargo de entregar un grupo a la cancillería y el Minsa.
“Cuando vienen estas 3.200 dosis de vacunas, vienen distribuidas. […]. Se entregan 1.200 a la Embajada China. Nos dan el resto a Cayetano Heredia, pero con el encargo de entregar un grupo a cancillería y otro al Ministerio de Salud para los funcionarios que participan en la lucha de la pandemia”, indicó.
El investigador principal de la UPCH señaló que a los funcionarios de los ministerios de Relaciones Exteriores y de Salud se les destinó un total de 150 dosis para ser inoculadas en 75 personas. La lista de las personas fueron elaboradas por estos dos sectores del Ejecutivo. El resto, que eran 1.850 dosis, fue distribuido.
“1.050 están en custodia y ya se empezó a vacunar a los voluntarios de la primera línea; 680 dosis se inocularon al staff que conforma el equipo de investigación de la universidad y que están en alta exposición; 120 dosis fueron destinadas a consultores seleccionados por la Cayetano Heredia, entre infectólogos así como el personal que maneja estadísticas. En este último grupo se consideró al vicedecano del Colegio Médico del Perú, Ciro Maguiña”, dijo.
Asimismo, señaló que si bien cuando llegaron las dosis en septiembre, solo existían estudios en Fase 2 y “no se podía decir que eran 100% efectivas”. No obstante, precisó que ya habían sido probadas en China pues habían sido inoculadas a miembros de su ejército. “Los chinos efectivamente la empezaron a usar de emergencia sin estudios detrás, lo cual era criticado en el mundo occidental porque la usaban en su ejército, por ejemplo. Lo hacían por un tema de seguridad, pero ya habían datos de que se estaba usando de emergencia en China”, aseguró.
“Pero desde el punto de vista formal y oficial, esas vacunas para septiembre tenían publicados estudios de fase 2. O sea que a ciencia cierta sabíamos la información de 800 personas que se habían vacunado para ese entonces [de ensayos clínicos en fase 1 y fase 2]”, añadió Málaga.
Málaga negó que haya existido un “tráfico de vacunas”. Sin embargo, no descartó que exista la posibilidad de que se haya filtrado gente en la lista del Minsa. “Es un tema que el Minsa debe responder”, consideró. “De repente puede sonar irregular, pero desde el punto de vista médico no es tan malo, o no es tan irregular, vacunar a funcionarios, porque sí necesitamos proteger a la persona y a su entorno”, remarcó. Para el investigador, se trata de “un bien privado cedido a otro un privado para que lo distribuya”.
Vizcarra sí se vacunó
Sobre el caso de Martín Vizcarra, el médico Germán Málaga aclaró que el expresidente sí tuvo conocimiento de que recibió una vacuna y que no era parte del ensayo clínico.
“Cuando vino al centro el 11 de setiembre, yo le hice un tour […] en el que le explico en qué consiste la toma de consentimiento informado”, precisó. El investigador detalló que luego de aprobarse el consentimiento informado, se realizó un examen de 15 preguntas. “Yo se lo expliqué [a Vizcarra]. Que ahora diga que no, que se confundió, que yo no le expliqué bien. No soy yo quien para juzgar qué entendió”, añadió.
A través de sus redes sociales, Vizcarra hoy ha reiterado que formó parte del ensayo clínico de la vacuna del laboratorio chino Sinopharm y esta vez señaló que, tras comentarle sus intenciones a su esposa Maribel Díaz y a su hermano mayor, también decidieron participar del proceso.
El exmandatario aseguró que no tuvo conocimiento de las dosis extras de vacunas contra el COVID-19 de parte del laboratorio chino Sinopharm al Perú.
“El día de ayer, por los medios de comunicación, recién he tomado conocimiento de la existencia de otros lotes de vacunas experimentales. Nunca supe que habían más vacunas de las 12 mil dosis para voluntarios que se hablaron”, afirmó en un video.