El presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo Vera, asegura que durante su gestión (2023-2024) se potenciarán los procesos contencioso-administrativos laborales relativos a las pensiones. Además, destaca la necesidad de que el país cuente con un Código de Trabajo, que deberá ser producto de un consenso.
¿Qué balance hace de la aplicación de la Nueva Ley Procesal del Trabajo?
–La Nueva Ley Procesal del Trabajo introdujo la oralidad en el país y eso fue bueno. Esta ley, por el transcurso del tiempo y porque desde sus orígenes presentaba también algunos defectos, necesita una modificación.
La principal que se debe hacer es la del recurso de casación. Existe un proyecto en el Congreso que esperamos se ponga a debate en esta legislatura.
Fuera de esto, falta adecuar la Ley Procesal del Trabajo a las tecnologías que surgieron con la pandemia del covid-19, sobre todo en la notificación de sentencias, que ya se efectúa en forma electrónica, pero que la ley todavía las manifiesta como personales. Esa sería un punto por cambiar.
También la forma de efectuar las audiencias. Hoy son de carácter electrónico, por vía Zoom, y la ley está en el supuesto de las audiencias presenciales.
–En todo caso, solo son puntos de actualización…
–Sí, son temas de actualización. No necesita cambios profundos, porque lo profundo de esta ley es la introducción del sistema de proceso por audiencias con predominio de la oralidad y eso no va a cambiar.
–¿Existe la necesidad de mejorar la legislación laboral para agilizar los procesos?
–Sí. El Perú es uno de los pocos países que no cuentan con un Código de Trabajo. Necesitamos tener uno que reúna las instituciones del derecho individual, derecho colectivo y derecho procesal del trabajo. Este código no existe.
Lo que sí manifiesto es que cualquier Código de Trabajo debe ser producto del consenso de empleadores, trabajadores y del Estado. No puede haber un código impuesto por un sector.
El Poder Judicial participaría porque administra justicia en materia laboral y en la elaboración tendría que opinar, porque será un usuario del código.
–¿Cuál es su balance en el tema de la oralidad en materia laboral?
–En los procesos de materia laboral, la oralidad ha sido una gran cosa. La oralidad permitió acelerar los procesos. Hoy, un proceso laboral dura, en promedio, seis meses. En total, en las dos primeras instancias en un año se obtienen resultados. Lo que sucede es que la forma como está regulada la casación laboral sí lleva a demoras.
Por eso, el Poder Judicial presentó un proyecto de ley para reformar la casación laboral y esta propuesta, que la elaboré, fue al Congreso, tuvo modificaciones y está ya para el debate. Hablé con el presidente del Parlamento [José Williams Zapata] y le pedí que se ponga en agenda el proyecto de reforma de la Ley Procesal del Trabajo en materia de casación.
–¿Cuáles son los procesos más recurrentes en el ámbito laboral que se agilizarían con los proyectos que plantea?
–En el ámbito laboral, los procesos más recurrentes son los de pagos de beneficios sociales, es decir, el abono de derechos remunerativos, gratificaciones, vacaciones y CTS.
En segundo lugar, tenemos los procesos de reposición. En el Perú existe reposición; entonces, muchos trabajadores que son despedidos recurren al Poder Judicial para pedir que se les readmita en sus centros laborales.
–¿Su gestión impulsará que se agilicen los procesos que inician los adultos mayores para el pago de sus pensiones y otros?
–Efectivamente, en el Poder Judicial el área laboral es la que atiende estos temas. Vamos a potenciar los procesos contencioso-administrativos laborales relativos a las pensiones. Estamos creando juzgados de ejecución porque ¿qué sucede con el pensionista? El pensionista gana el juicio, pero no puede cobrar, hay mucha traba, es como un embudo.
Entonces, con más cantidad de juzgados de ejecución podremos impulsar que se hagan efectivo los cobros.
–¿Se crearán más órganos jurisdiccionales laborales a escala nacional?
–Sí, hubo poca atención a la justicia laboral por el Poder Judicial. Claro, la justicia laboral no es mediática, no da noticia, pero es importante porque consigue paz social y justicia social. Todos los problemas que hemos atendido con los sindicatos, con los trabajadores y con los pensionistas, todo eso vemos.
–¿Cómo tratará su gestión los plenos laborales y qué temas se podrían tocar en estas reuniones?
–Los plenos laborales son muy importantes porque estos plenos jurisdiccionales, que en realidad pueden ser laborales o de otra especialidad, van a llevar a la unificación de criterios, que traerá seguridad jurídica.
Así, el usuario del sistema de justicia sabrá cómo van a resolver los jueces y, en todo caso, el magistrado que no decidió de esa forma tendrá que justificar, o sea, fundamentar adecuadamente por qué no resolvió de esa forma.
Entonces, esto brinda seguridad. Sabemos que esto es negro, pues eso será siempre negro. El blanco no puede ser un día blanco y otro azul; esto no puede suceder, crea inseguridad y lleva a la presunción de corrupción porque la persona puede decir: ‘Ah, ¿por qué el juez resuelve así?, seguro incurrió en actos de corrupción’.
Vigésima publicación
Como experto en la materia, Javier Arévalo anunció la segunda edición de su obra principal Tratado de derecho laboral, el cual incluye el estudio del derecho laboral individual y el derecho colectivo del trabajo.
“El primero está referido a las relaciones entre los trabajadores individualizados con un empleador; en cambio, el segundo está vinculado con las relaciones entre las organizaciones sindicales y el empleador u organización de empleadores”, explicó.
El magistrado informó también que publicará próximamente el segundo tomo, que comprende el estudio del derecho procesal del trabajo. “¿Por qué no se incluyó en este tomo? Porque en este momento ya está en el pleno el proyecto de reforma de la casación laboral”, afirmó.
“Este libro constituye un aporte que estará al alcance de los estudiantes, de los profesionales del Derecho, de los jueces y de toda aquella persona que trate de iniciarse en el estudio del tema laboral. Esta obra constituye mi vigésima publicación”, reveló.
Fecha
24 de este mes será la presentación del libro, a las 18:00 horas, en el Colegio de Abogados de Lima.
Fuente: El Peruano
