Por Juan Carlos Zevallos Roncagliolo
(Abogado Senior especialista en Derecho Corporativo, Laboral y Negociación con experiencia relevante en empresas mineras, instituciones de salud, empresas industriales, del sector construcción y de consultoría).
Antecedentes generales.-
Desde tiempos inmemoriales el Perú se ha caracterizado por ser un país de eminente tradición minera. Esto último, desde la época pre-inca, inca, colonial y republicana. Bajo este contexto, no resulta difícil afirmar que la minería peruana ha tenido un papel trascendental como principal catalizador de la inversión productiva y del desarrollo económico – social de nuestro país. A lo largo del siglo pasado, a inicios del año 1900 y en las siguientes décadas, en el Perú la actividad minera fue desarrollada por algunos grupos como el de la familia alemana Plücker, Backus & Jhonston, Benavides, entre otras que con gran dedicación, esfuerzos y visión pudieron hacer del negocio minero una actividad muy rentable y de gran perspectiva. Sin embargo, y muy a pesar del compromiso del minero peruano, por esos años la actividad minera era liderada predominantemente por la minera norteamericana Cerro de Pasco Copper Corporation que poseía diversos activos mineros, minas y circuitos metalúrgicos en operación. Además, disponía de gran tecnología y capital para emprender proyectos de gran envergadura. Pero, es hasta el año 1974 que la Cerro de Pasco Copper Corporation pasa a manos del estado, que la actividad minera llega a tener un severo decrecimiento y un atraso tecnológico y económico que repercutió en el devenir minero de nuestro país generando grandes pasivos mineros y problemas sociales, técnicos y ambientales. De esta manera, con la llegada de la década de los 80´s, la actividad minera retrocedió significativamente en cuanto a inversiones, empleo y otras variables. En dicha época, problemas estructurales como la deuda externa, la hiperinflación, el estatismo y la alarmante situación de la subversión tenían a nuestro país al borde del colapso económico y social. Este panorama minero sobre el que se venía desenvolviendo nuestro país, se mantendría hasta inicios de la década de los 90´s, que fue una década en la cual se revaloriza la propiedad y se comienza a brindar a los inversionistas trato nacional en el entendido que le minería constituía una actividad trascendental para el despegue económico de nuestro país como promotora del desarrollo, a través de la implantación de formas de negocio minero más flexibles, universales y estandarizadas para posibilitar la inversión en toda su dimensión.
Antecedentes de la figura de Responsabilidad Social Empresarial en el sector minero peruano
En los años 90´s con la llegada al gobierno del Ingeniero Alberto Fujimori se procedió liberalizar y flexibilizar las normas de promoción minera para las actividades de exploración, explotación, beneficio, transporte minero, comercialización y labor general permitiendo el ingreso de diversas empresas privadas en reemplazo de Minero Perú y de sus demás proyectos mineros.
Con estas medidas, el estado peruano se desprendía paulatinamente de su vocación eminentemente minera para convertirse en un ente regulador del mercado, promotor de actividades mineras y extractivas, y por ende, en ente subsidiario del sector energía y minas. En este contexto, cada vez más empresas mineras de capitales extranjeras y nacionales con buenas prácticas técnicas, legales, laborales, ambientales y sociales comienzan a ganar escena a través de la compra de activos mineros que estuvieron en manos del estado.
Es en este contexto de crecimiento económico exponencial, del desarrollo de los mercados financieros en el Perú, de solidez macroeconómica, de la gran apertura a la promoción de la inversión extranjera en actividades mineras y extractivas, que el sector minero de nuestro país, que venía siendo contagiado por los grandes efectos de la globalización, comienza a perfilar el concepto de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en sus operaciones y en sus relaciones con el gobierno y el entorno productivo. Vale decir, que el concepto de RSE llega a tener especial trascendencia en las empresas industriales en la década de los 90´s, porque comienza a integrar la noción de RSE como un fenómeno indispensable y no aislado dentro de la organización en general. Cabe resaltar, que las empresas mineras no fueron ajenas a estas nuevas tendencias que buscaban que las empresas se vayan haciendo responsables de sus propias decisiones de alcance social.
La noción del Desarrollo Sostenible y su funcionalidad.-
Es de esta manera, que al ser el sector minero particularmente sensible a los distintos cambios y movimientos sociales, es que conjuntamente con las nuevas tendencias del sector minero producto de la globalización en el plano tecnológico, social, ambiental y técnico, es que se hacía indispensable poner en marcha todo un paquete de medidas estratégicas orientadas a promover la responsabilidad social empresarial que permita un adecuado relacionamiento de la empresa minera con sus grupos de interés, una participación más activa de la empresa minera en el desarrollo económico, social y productivo y una mejor coordinación y alineamiento de los intereses de la empresa minera con los del estado a través del establecimiento de acciones conjuntas en el plano social. En este propósito, es imposible hablar de RSE de las empresas mineras sin abordar el concepto de desarrollo sostenible, que le permite a las empresas industriales, en este caso, a las empresas de las industrias extractivas, lograr la realización de sus actividades productivas en armonía con el medio ambiente y el equilibrio socioeconómico. De esto último, se desprende el mayor equilibrio social, económico y ambiental al que debe de aspirar toda empresa minera en el ejercicio de sus operaciones. A este respecto, vale señalar lo que señaló la Comisión Brundtan/ONU cuando al desarrollar el concepto mundialmente reconocido de desarrollo sostenible señala: “es aquel que permite satisfacer las necesidades de la generación de hoy sin perjudicar la capacidad de futuras generaciones de satisfacer las suyas”.
En este escenario, resulta de especial importancia que las empresas mineras puedan alinear sus intereses corporativos con los de su entorno ambiental, sus trabajadores, su comunidad, el estado, sus accionistas y demás actores sociales para promover canales de diálogo y concertación para el desarrollo de su área de influencia a través de la integración vertical de su aparato productivo, de la generación de empleo. De esta manera, se favorecerá la promoción y consolidación de industrias relacionadas con el sector. Es así, que a través de la implementación de una política de RSE responsable, seria, estratégica y debidamente canalizada, las empresas mineras podrán obtener beneficios que redundarán en el aspecto operativo, financiero, administrativo y en lo que atañe a la reputación de la misma. A partir del año 2000 y a la fecha, con la modernización de operaciones mineras existentes, el ingreso de nuevas operaciones mineras y la promoción numerosos proyectos de exploración minera, la noción de RSE de entre las empresas del sector pasó a convertirse en un elemento diferenciador dentro de los factores competitivos del sector que comenzó a redundar en la imagen de las empresas, en la confianza del mercado y en su manejo económico-financiero. En este escenario aparecieron diversas organizaciones promotoras de la ética, la RSE y la transparencia en las operaciones mineras.
Las organizaciones peruanas promotoras de la ética, la RSE y la transparencia en las operaciones mineras.-
Entre las organizaciones que promueven un desempelo ético de las empresas mineras con RSE y plena transparencia en sus operaciones podemos citar, a la Sociedad Nacional de Minería Petróleo y Energía (SNMPE), que alimentada por la corriente internacional del desarrollo sostenible y las nuevas tendencias de RSE establecieron un Código de Conducta de obligatorio cumplimiento por parte de las empresas afiliadas a la organización. Otra organización, que merece atención lo es Perú2021, que es una entidad orientada a la promoción de un manejo empresarial social, económica y ambientalmente viable difundiendo estrategias destinadas a asegurar el desarrollo sostenible y premiando a aquellas empresas socialmente responsables que promueven el desarrollo sostenible.
Regulación de los conceptos de RSE y Desarrollo Sostenible en el Perú y el Mundo.-
De igual manera, y aparejado a lo anterior, los distintos organismos internacionales, nacionales y los estados miembros de las Naciones Unidad comenzaron a adoptar dentro de sus legislaciones diversas pautas orientadas a la consecución de la armonía social, al desarrollo sostenible y al equilibrio socioeconómico. Por este motivo, y yendo al caso de nuestro país, se adoptaron una serie de dispositivos como los Principios Voluntarios en seguridad y derechos humanos, el Pacto Mundial del Desarrollo Sostenible, las pautas establecidas por el Consejo Internacional para los minerales y metales, entre otros. En el plano local, el estado peruano promulgó normas tales como: el D.S N° 042-2003 EM que establece el compromiso social previo, las Guías de relaciones comunitarias del Ministerio de Energía y Minas y la Resolución Ministerial N° 596-2002-EM/DM, que es el reglamento de consulta y participación ciudadana en el procedimiento de aprobación de los estudios ambientales en el sector energía y minas.
Un asunto que merece especial atención es el del alcance de la Ley N° 29785 Ley de Consulta Previa a los pueblos indígenas y originarios, así como su Reglamento aprobado por D.S N° 001-2012-MC, que fueron promulgados en Setiembre del 2011 durante el gobierno del Presidente Humala, el mismo que en cumplimiento de su promesa de campaña y demostrando un firme compromiso con la RSE del estado y las entidades privadas en aras de alcanzar la tan ansiada inclusión social agotó todos sus esfuerzos y recursos conjuntamente con la sociedad y el Congreso de la República para la dación de la norma señalada, entre otras que regulaban el aporte minero y los impuestos a la actividad minera.
Las empresas mineras y su autorregulación en base a las normas de transparencia, RSE, ética y desarrollo sostenible, así como sus actividades de contribución social.-
Ahora bien, en relación a las propias empresas del sector minero, consideramos pertinente hacer mención los grandes esfuerzos de estas mismas por autorregularse a través de sus propios protocolos empresariales que constituyen pautas estandarizadas adoptadas por estas en aspectos comunitarios, ambientales y sociales. De esta forma, las empresas mineras que operan en nuestro país ponen en evidencia un real compromiso social efectivo. De otro lado, en los últimos años diversas organizaciones relacionadas con el sector minero comenzaron a premiar las buenas prácticas empresariales, la RSE y el desarrollo sostenible. Dentro de estas, cabe mencionar el premio que otorga PriceWaterhouseCoopers (PWC) de la empresa más admirada del año. También, existen otros premios empresariales tales como: el premio empresa peruana del año y de la creatividad empresarial. En muchos de estos casos, son las empresas mineras las que financian estos premios para garantizar una contribución real y efectiva con la sociedad, promoviendo el conocimiento, la investigación y el desarrollo profesional y la creatividad empresarial.
Este es el caso de Southern Perú Copper Corporation, empresa de la gran minería peruana que contribuye como empresa auspiciadora del premio creatividad empresarial organizado por la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC). En esta línea, si reproducimos lo contemplado en la website de la UPC, cuando se refiere al pensamiento guía de este premio, podemos compartir lo siguiente: “Conscientes del entorno competitivo que se vive en el ámbito empresarial actual, queda claro que el camino de la innovación es la única ruta a seguir por las organizaciones para llegar al éxito deseado. Innovar implica hacer las cosas de una manera distinta, pensar distinto; implica romper el esquema de lo convencional utilizando al máximo aquello que caracteriza a los peruanos: nuestra creatividad.” En esta misma línea, y como muestra de la gran contribución de las empresas mineras al desarrollo personal, socioeconómico y productivo local, contribuyendo al PBI nacional resulta de especial importancia compartir la experiencia de Compañía Minera Antamina, que a través del Fondo Minero Antamina desarrolla labores sociales en sus áreas de influencia con capital propio. Siendo que año a año se incrementa de manera significativa.
Otro caso interesante, es el de la misma Southern Perú Copper Corporation que a través de la Asociación Civil ayuda del Cobre realiza labor social ejecutando obras de desarrollo social, proyectos y programas sociales en áreas sensibles con decidido pensamiento cívico, contributivo y altruista. Finalmente, tenemos el caso de Compañía Minera Yanacocha que desarrolla proyectos para la mejora de la calidad de vida de sus comuneros, garantizando: un adecuado manejo del suelo, un apropiado cierre de mina y un uso racional del agua y de la biodiversidad.
El nuevo concepto de la RSE enfocado en la inclusión social.-
Con todo lo dicho, podemos decir que las estrategias de RSE practicadas por las empresas mineras en el Perú ha dado paso a un nuevo concepto de RSE enfocado en gran medida en la búsqueda de la inclusión social, integración íntima con el entorno productivo y en una política social decidida de intervención frontal en el quehacer local, regional y nacional, asegurando una calidad de vida digna, desarrollo social y la provisión de servicios básicos esenciales que garanticen los requerimientos fundamentales de los pueblos Hoy en día, y muy a pesar de los grandes avances en los aspectos relativos a la RSE por parte de las empresas mineras desde la década de los 90´s a la fecha, se ha podido detectar una muy conflictividad social y ambiental, en parte por la debilidad institucional del estado, la creciente discordancia e intereses contrapuestos de los pobladores de zonas de influencia, activistas y ONG´s. Esto último, por la mala percepción que se ha venido formando la población a lo largo de todos estos años respecto a las empresas mineras por los grandes pasivos ambientales.
Necesidad de redefinir las políticas de RSE de las empresas mineras en el contacto con su entorno.-
Pero, resulta paradójico que siendo la minería formal en nuestros días el motor del crecimiento e inclusión social, se le siga atribuyendo la responsabilidad por las protestas sociales cuando quienes hoy en día contaminan de manera alarmante son los mineros ilegales e informales de 21 de las 25 regiones de nuestro país. Se cree que gran parte de estos conceptos deformados y tergiversados respecto a la actividad minera se encuentran alimentados por intereses subalternos con afanes políticos y de personas con sesgos ideológicos. En este punto, no podemos negar que influyen los manejos indebidos en las estrategias de RSE de algunas empresas que encarecen las opciones de acercamiento con la población y ponen en serios aprietos la inversión minera. Por estas consideraciones, es que las empresas mineras deben de redefinir de manera periódica sus estrategias de relacionamiento con su entorno para adaptarlas a los nuevos escenarios políticos, culturales y sociales tan cambiantes.
En particular, toda empresa minera debe de tomar en cuenta los siguientes asuntos claves: empleo, el uso de tierras, la conducta de los trabajadores, lo relativo a la fuerza laboral, el impacto ambiental, la adquisición local, la inversión social, el transporte, el uso de regalías, impuestos, los grupos de interés y participación, así como el aspecto vinculado al canon minero. Sólo de esta manera, la empresa del sector minero estará en capacidad de identificar problemas y solucionarlos tomando en cuenta las necesidades de la población, las variables sociales y propias del proyecto.
Aspectos a considerar para mejorar la gestión de la RSE.-
Siguiendo esta línea de pensamiento, y de acuerdo a lo analizado en el presente apartado, se ha podido identificar aspectos a considerar para mejorar la Gestión de la RSE en las empresas mineras del Perú, estos son los siguientes:
Que en el relacionamiento de la empresa minera con su entorno tome en cuenta el desarrollo socio cultural del sujeto del área de influencia de sus respectivas operaciones mineras brindándole capacitación e identidad para dotarlo de productividad.
También, debe tomarse en cuenta la naturaleza del progreso que se quiere lograr respecto al poblador de la zona en el sentido de otorgarle herramientas permanentes para valerse por sí mismo y trascender a la existencia de la empresa minera.
Otro aspecto a considerar, es que en cada proyecto y operación minera la empresa de ese sector tome en cuenta los alcances del desarrollo sostenible de las políticas de relacionamiento y en la mejora de la imagen corporativa a través del contacto directo con la población mostrando empatía, sensibilidad y comprensión de la realidad local.
De igual modo, la empresa minera deberá integrar en su vida cotidiana como actor protagónico a la población de la zona en su proceso productivo a través de la generación de canales de diálogo y concertación, generando confianza a través de la promoción del empleo, servicios y productos para su actividad y ayudando a los gobiernos regionales, locales y nacionales en la ejecución de obras, proyectos y actividades sociales, así como en la provisión de servicios esenciales.
En este sentido, la inversión prevista por parte de la empresa minera debiera de estar enfocada no en proyectos para el alivio de la pobreza, sino en aquellos que redunden en el desarrollo productivo a través de la generación de Clusters productivos de empresas integradas y complementadas con el aparato productivo de la empresa minera como los programas de capacitación para operar máquinas, proyectos para favorecer la industria alimentaria, turística, para favorecer la cultura, el arte y la investigación, entre otros que creen valor y favorezcan el conocimiento práctico.
De esta manera, se comenzarán a forjar relaciones duraderas entre poblador y empresa minera basadas en la confianza mutua, buena fe y lealtad. De igual forma, se podrá ir retirando poco a poco la creencia del clientelismo y la visión paternalista, con la cual es siempre asociada la operación minera para poder brindar paso a una visión integradora útil y eficiente del desarrollo local productivo, al otorgar herramientas básicas, capacitación, recursos y apoyo moral para lograr niveles de paz social, inclusión social y un verdadero desarrollo autónomo que les brinde la posibilidad a estas personas de aprender a gestionar sus propios intereses.
4.2.5.-Conclusión:
- Desde tiempos inmemoriales el Perú ha sido un país de eminente tradición minera desde la etapa re inca hasta el período republicano y de ahí hasta nuestros días con lo cual resulta innegable su valioso aporte a la nación como actividad generadora de empleo, progreso y desarrollo social.
- En el Siglo XX con el ingreso de capitales extranjeros como el de la Cerro de Pasco Copper Corporation y de otros inversionistas locales se comenzó a la apertura de nuevas operaciones y a la rehabilitación y modernización de las existentes.
- En la década de los 70´s con el ingreso del Gobierno Revolucionario de las FFAA, que dio paso al estatismo, a la hiperinflación, inestabilidad social, económica y al aumento alarmante de la deuda externa y la alta conflictividad social, la industria minera se vio seriamente perjudicada al contraer su crecimiento, así como por la mutilación de la Cerro de Pasco Copper Corporation que postergó el avance tecnológico, económico y social del país.
- Esta situación no mejoró en la década del 80 donde se abría paso la subversión y la agudización de nuestros otros problemas económicos y sociales, que mantuvieron dormida nuestra economía y encareció más el sector minero peruano.
- Sin embargo, a inicios de la década de los 90´s con motivo del rescate de la democracia y teniendo casi ganada la contienda con los subversivos, precisamente en el gobierno de Fujimori, se produjeron una serie de cambios políticos, económicos y legales que promovieron la inversión, la liberalización de nuestra economía promoviendo el trato nacional y la protección de la propiedad privada empresarial en las empresas del Perú, se comenzaría a abordar el tema de la RSE como fiel reflejo de los compromisos adquiridos por el gobierno peruano y la clase empresarial. Más aún, en un mundo globalizado con procedimientos estandarizados para los negocios, el comercio y el trato social.
- Es en este escenario, que el contenido del concepto de RSE llega a tener gran relevancia al ser un fenómeno relativamente nuevo en nuestro país pero que en los últimos años ha sido de ágil crecimiento y gran difusión, porque les ha permitido a los estados y demás actores sociales, entre ellos, las empresas del sector minero autorregularse y fijar procedimientos de operación para asegurar un adecuado desarrollo sostenible basado en el equilibrio económico, social y ambiental.
- Es de esta manera, que al ser el sector minero particularmente sensible a los distintos cambios y movimientos sociales, es que conjuntamente con las nuevas tendencias del sector minero producto de la globalización en el plano tecnológico, social, ambiental y técnico, es que se hacía indispensable poner en marcha todo un paquete de medidas estratégicas orientadas a promover la responsabilidad social empresarial que permita un adecuado relacionamiento de la empresa minera con sus grupos de interés, una participación más activa de la empresa minera en el desarrollo económico, social y productivo y una mejor coordinación y alineamiento de los intereses de la empresa minera con los del estado a través del establecimiento de acciones conjuntas en el plano social. Es imposible hablar de RSE de las empresas mineras sin abordar el concepto de desarrollo sostenible, que le permite a las empresas industriales, en este caso, a las empresas de las industrias extractivas, lograr la realización de sus actividades productivas en armonía con el medio ambiente y el equilibrio socioeconómico.
- Resulta de especial importancia que las empresas mineras puedan alinear sus intereses corporativos con los de su entorno ambiental, sus trabajadores, su comunidad, el estado, sus accionistas y demás actores sociales para promover canales de diálogo y concertación para el desarrollo de su área de influencia a través de la integración vertical de su aparato productivo, de la generación de empleo.
- A partir del año 2000 y a la fecha, con la modernización de operaciones mineras existentes, el ingreso de nuevas operaciones mineras y la promoción numerosos proyectos de exploración minera, la noción de RSE de entre las empresas del sector pasó a convertirse en un elemento diferenciador dentro de los factores competitivos del sector que comenzó a redundar en la imagen de las empresas, en la confianza del mercado y en su manejo económico-financiero. En este escenario aparecieron diversas organizaciones promotoras de la ética, la RSE y la transparencia en las operaciones mineras.
- Los distintos organismos internacionales, nacionales y los estados miembros de las Naciones Unidas comenzaron a adoptar dentro de sus legislaciones diversas pautas orientadas a la consecución de la armonía social, al desarrollo sostenible y al equilibrio socioeconómico. Por este motivo, y yendo al caso de nuestro país, se adoptaron una serie de principios, dispositivos normativos y sectoriales que puedan transcribir la exigencia de RSE en las empresas mineras.
- Las estrategias de RSE practicadas por las empresas mineras en el Perú desde los años 90´s en adelante ha dado paso a un nuevo concepto de RSE enfocado en gran medida en la búsqueda de la inclusión social, integración íntima con el entorno productivo y en una política social decidida de intervención frontal en el quehacer local, regional y nacional, asegurando una calidad de vida digna, desarrollo social y la provisión de servicios básicos esenciales que garanticen los requerimientos fundamentales de los pueblos.
- En nuestros días, y muy a pesar de los grandes avances en los aspectos relativos a la RSE por parte de las empresas mineras desde la década de los 90´s hasta nuestros días, se ha podido detectar una muy conflictividad social y ambiental, en parte por la debilidad institucional del estado, la creciente discordancia e intereses contrapuestos de los pobladores de zonas de influencia, activistas y ONG´s. Esto último, por la mala percepción que se ha venido formando la población a lo largo de todos estos años respecto a las empresas mineras por los grandes pasivos ambientales. Pero, resulta paradójico que siendo la minería formal en nuestros día el motor del crecimiento e inclusión social, se le siga atribuyendo la responsabilidad por las protestas sociales cuando quienes hoy en día contaminan de manera alarmante son los mineros ilegales e informales de 21 de las 25 regiones de nuestro país.
- No podemos negar que los manejos indebidos en las estrategias de RSE de algunas empresas mineras, dificultan las opciones de acercamiento de la empresa con la población, lo que pone en serios aprietos la inversión minera en la zona de influencia. Por estas consideraciones, es que las empresas mineras deben de redefinir de manera periódica sus estrategias de relacionamiento con su entorno para adaptarlas a los nuevos escenarios políticos, culturales y sociales tan cambiantes.
- En particular, toda empresa minera debe de tomar en cuenta los siguientes asuntos claves: empleo, el uso de tierras, la conducta de los trabajadores, lo relativo a la fuerza laboral, el impacto ambiental, la adquisición local, la inversión social, el transporte, el uso de regalías, impuestos, los grupos de interés y participación, así como el aspecto vinculado al canon minero. Sólo de esta manera, la empresa del sector minero estará en capacidad de identificar problemas y solucionarlos tomando en cuenta las necesidades de la población, las variables sociales y propias del proyecto.
- En particular, toda empresa minera debe de tomar en cuenta los siguientes asuntos claves: empleo, el uso de tierras, la conducta de los trabajadores, lo relativo a la fuerza laboral, el impacto ambiental, la adquisición local, la inversión social, el transporte, el uso de regalías, impuestos, los grupos de interés y participación, así como el aspecto vinculado al canon minero. Sólo de esta manera, la empresa del sector minero estará en capacidad de identificar problemas y solucionarlos tomando en cuenta las necesidades de la población, las variables sociales y propias del proyecto.
- Para finalizar, existen diversos aspectos a considerar para la mejora de la Gestión de la RSE en las empresas mineras del Perú, estos son los siguientes: que la empresa minera tome en cuenta el desarrollo socio cultural del sujeto del área de influencia, que tome en cuenta la naturaleza del progreso que se quiere lograr respecto al poblador de la zona en el sentido de otorgarle herramientas permanentes para valerse por sí mismo y trascender a la existencia de la empresa minera, que la empresa de ese sector tome en cuenta los alcances del desarrollo sostenible de las políticas de relacionamiento y en la mejora de la imagen corporativa a través del contacto directo con la población mostrando empatía, sensibilidad y comprensión de la realidad local. En este sentido, la inversión prevista por parte de la empresa minera debiera de estar enfocada no en proyectos para el alivio de la pobreza sino en aquellos que redunden en el desarrollo productivo a través de la generación de Clusters productivos de empresas integradas y complementadas con el aparato productivo de la empresa minera. De esta manera, se comenzarán a forjar relaciones duraderas entre poblador y empresa minera basadas en la confianza mutua, buena fe y lealtad. De este modo, se irá retirando la visión paternalista y clientelista del negocio minero y se consolidará un verdadero desarrollo autónomo que les brinde la posibilidad a estas personas de aprender a gestionar sus propios intereses.
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