Keiko Fujimori recibió un aporte de más de un cuarto de millón de dólares para su campaña política en el 2011 de parte de la empresa minera Volcan, según reveló este jueves el vicepresidente de la firma del sector extractor, José Ignacio de Romaña Letts. Romaña Letts declaró ante los fiscales del Equipo Especial que, a través de la Confiep, la Minera Volcan entregó 260 mil dólares para financiar la campaña de la lideresa de Fuerza Popular.
El aporte si dio en el marco de la segunda vuelta para las elecciones presidenciales que se disputó entre Ollanta Humala y Keiko Fujimori, contienda que, finalmente, fue ganada por el líder del Partido Nacionalista.
El aporte fue, según pudo conocer La República, para defender la empresa privada ante la supuesta amenaza que Humala representaba al conocerse su otrora cercanía con el gobierno de Venezuela, evidenciada durante la campaña de 2006.
Hasta la fecha, los empresarios que han desfilado ante el Equipo Especial para el caso Lava Jato revelaron aportes al partido fujimorista que pasan ya lo 4 millones de dólares, monto que, todo parece indicar, no fueron declarados por la agrupación liderada por Keiko Fujimori.
El primero en confesar ante los fiscales del caso Lava Jato fue el empresario Dionisio Romero, quien confirmó un aporte a la campaña de Keiko Fujimori en el 2011 que ascendió a 3.65 millones de dólares. .
Otro aporte a la campaña fujimorista en el 2011 provino de la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco), a través de la Confiep, según reveló José Graña Miro Quesada, exdirectivo de la constructora Graña y Montero.
Según Graña Miro Quesada, en el 2011 Capeco aportó 240 mil dólares a la campaña fujimorista.
Aportes confirman tesis de la Fiscalía
En declaraciones, el fiscal del Equipo Especial José Domingo Pérez, encargado de la investigación contra Keiko Fujimori, estimó que las revelaciones de los aportes de diversos empresarios a la campaña fujimorista refuerza su tesis de trabajo sobre el presunto lavado de activos en el que habría incurrido la lideresa de Fuerza Popular.
“[Se] tiene que caer en la cuenta de que esta modalidad es típica del lavado de activos. El fraccionamiento para no poder identificar finalmente quiénes son los que han entregado el dinero”, manifestó el fiscal.
Fuente: La República