La implementación de la oralidad en la justicia civil es un instrumento para que el magistrado pueda internalizar los hechos que las partes proponen y sea una oportunidad para que él pueda avanzar en la indagación de la verdad, que es la razón de ser para la decisión judicial final.
Así lo sostuvo el jurista y catedrático Nelson Ramírez Jiménez, tras calificar como un gran acierto para la justicia la adopción de dicha institución.
“Lo que ha realizado el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial en esta materia es uno de sus grandes aciertos, pues comienza el cambio de lo que tenemos y esperamos la actitud benevolente del legislador, ya que seguimos con una crisis”, señaló.
Deformación de la oralidad
De otro lado, remarcó que la reforma procesal civil de 1993 no pudo cristalizarse por razones de recursos, tecnología y capacitación.
Lamentó también que en ese tiempo la oralidad fue desnaturalizada en la redacción de las actas de las audiencias. Esto debido a que estas muchas veces llegaban elaboradas.
Además, dijo que no hubo conciliación, pues “se admitieron todas las pruebas, se fijaron los puntos controvertidos; todo era una repetición de textos, un ritualismo”.
Incluso anotó que se confunde la actuación verbal con oralidad, ya que las partes estaban presentes en la audiencia y hablaban frente al juez, lo cual se confunde como oralidad.
En este contexto, enfatizó que la oralidad civil es un proceso en igualdad de condiciones donde las partes ejercen su propia defensa y además tienen sus propias características, distintas a las que utiliza la oralidad penal y laboral.
El jurista declaró durante su participación en Justicia TV, con el tema de la “Oralidad y su eficacia en los procesos civiles”, conducido por el magistrado Héctor Lama More.
Medidas
El jurista recomendó de igual modo diversas variables procedimentales para coadyuvar en la descarga procesal. Así, por ejemplo, los procesos colectivos pueden ser resueltos mediante un solo proceso colectivo, evitando saturar las instancias judiciales.
Otro aspecto es potenciar la justicia de paz letrada, que incluso debe ser especializada. Dijo también que los abogados deben estar más preparados en aplicar la oralidad civil.
Fuente: El Peruano
