El Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MINCETUR) de Perú recibió un número impresionante de solicitudes de licencias tras la implementación de la Ley 31.557. Esta normativa, que regula los juegos en línea y casas de apuestas Perú, sin duda significó el comienzo de una nueva era para los jugadores peruanos.
En tan solo un mes, 80 empresas presentaron un total de 145 solicitudes para la operación de plataformas de juego y de apuestas deportivas online. Según afirmó Yuri Guerra, director general de Juegos de Casinos y Máquinas Tragamonedas de Perú, de esas 145 solicitudes ya han evaluado 60, arrojando un resultado de 43 autorizadas y otras 17 no aptas para una licencia.
El proceso de solicitud también ha visto la aprobación de proveedores de servicios y laboratorios de certificación internacionales. Hasta ahora son siete los laboratorios autorizados —incluidos los renombrados Gaming Laboratories International (GLI) y BMM Testlabs—, los cuales han sido aprobados por el MINCETUR para certificar que las plataformas de juego cumplan con los estándares de seguridad y legalidad.
Este aluvión de solicitudes demuestra que la nueva ley está a la altura de las expectativas. Evidentemente, una normativa así era necesaria tanto para que las empresas tengan un marco regulador que les permita invertir, como también generar ingresos para el Estado y proporcionar un entorno seguro y controlado para los usuarios de juegos de azar en línea en Perú.
Cabe destacar que el interés no solo proviene de operadores nacionales. La regulación atrajo a grandes compañías internacionales, incentivadas por la estabilidad y claridad del nuevo marco legal. Empresas de renombre han comenzado a establecerse en Perú, lo que refuerza el atractivo del mercado local y combate la proliferación de Perú casas de apuestas ilegales. Este fenómeno también subraya la importancia de los juegos de azar en línea en Perú como un sector de rápido crecimiento y peso para la economía nacional.
La Ley 31.557 fue diseñada para regular un sector que ha crecido exponencialmente en los últimos años. Si bien no existen cifras oficiales, se calcula que alrededor de 7 millones de peruanos han realizado alguna apuesta online y que la facturación anual del sector supera los USD 1.000 millones al año.
En ese sentido, el impacto económico de esta regulación es significativo. Con un impuesto del 12 % sobre los ingresos brutos del juego, se espera que las casas de apuestas deportivas y juegos de azar en línea en Perú generen importantes beneficios financieros para las arcas del Estado.
Más concretamente, el Gobierno peruano estima que esta medida podría traer ingresos por alrededor de PEN 162 millones (USD 42,7 millones) al año. Además, la distribución de estos ingresos está cuidadosamente planificada: El 40 % se destinará a MINCETUR para el control y supervisión de las operaciones, y el resto se repartirá equitativamente entre el Tesoro Público, la Dirección de Salud Mental del Ministerio de Salud y el Instituto Peruano del Deporte.
