El objetivo es claro. Transformar la justicia tradicional mediante reformas que son muy decisivas: El Expediente Judicial Electrónico (EJE), el buque insignia de la modernidad judicial, la ansiada reforma procesal con aplicación de la oralidad, mejor gestión del volumen de los procesos judiciales, entre otras medidas. Todo esto en el marco de una hoja de desarrollo institucional al 2030. Así lo explica, dando un alto en su agenda, el presidente del Poder Judicial, José Luis Lecaros.
¿A qué líneas de trabajo usted le está dando mayor impulso en estos primeros meses?
Mi gestión está abocada en liderar la lucha contra la corrupción desde el Poder Judicial tras la crisis generada por los ‘CNM Audios’ y los destapes por el caso Lava Jato, que reveló pagos de millones de dólares en sobornos por la adjudicación de obras públicas.
También en fortalecer la independencia de la institución y sacar adelante la justicia digital con la modernización del Poder Judicial a través del Expediente Judicial Electrónico, la priorización de las reformas procesal penal, laboral y civil, que aplica la oralidad, una mejor gestión del volumen procesal así como en trazar una hoja de desarrollo institucional al 2030, entre otras acciones.
¿Cómo va el trabajo del sistema de justicia para enfrentar los casos derivados por los ‘CNM Audios’ y Lava Jato?
El Poder Judicial asumió ese reto y ha dado muestras claras de que tiene la capacidad institucional, profesional y ética, para juzgar estos procesos con imparcialidad e independencia. No puede haber sospecha alguna de influencia política o grupo de poder en la autonomía de nuestros jueces. Mi gestión, además, está brindando todo el apoyo a la Corte Especializada en Delitos de Corrupción y Crimen Organizado, encargada de la judicialización de estos importantes casos.
¿Y cómo va la puesta en marcha del EJE?
Por buen camino. El EJE es el buque insignia del Poder Judicial, un compromiso asumido como parte de nuestra política institucional y uno de los puntales en mi gestión, porque nos asegura procesos judiciales más ágiles, predecibles, escrutables y menos vulnerables a la corrupción.
Hemos superado a la fecha los cien mil expedientes electrónicos y, antes de fin de año, el EJE será implementado en las cortes de Ventanilla y Tacna, siempre en materia laboral. El objetivo es transformar en el largo plazo el sistema de justicia para dotarlo de mayor agilidad, transparencia y eficacia, es decir una justicia digital, situando al ciudadano en el centro del cambio.
¿Por qué es importante la oralidad en la reforma judicial que usted promueve?
El impulso de la oralidad en los procesos judiciales, que significa cambiar el método tradicional por la técnica de litigación oral, busca dar solución a la sobrecarga y el hacinamiento que padece el sistema judicial. Por ello, como parte del “Proyecto Piloto para la Modernización del Despacho Judicial en los J u z g a d o s Civiles”, hemos dispuesto el funcionamiento del Primer Módulo Civil Corporativo de Litigación Oral de la Corte de Lima, que es un distrito judicial clave, y está implementándose en las cortes de Arequipa, La Libertad, Callao y también pronto se hará lo propio en Ventanilla y El Santa.
¿Cómo enfocará los esfuerzos de su gestión de ahora en adelante?
Primero, continuar con el fortalecimiento de la autonomía institucional y modernización del servicio de justicia. Eso no puede parar. Para ello fortaleceremos aún más proyectos como el EJE, las reformas procesales en materia penal, civil y laboral, y en acercar más la justicia a los sectores vulnerables de la sociedad, pero también en elegir juntos con otros representantes del sistema de justicia, e s t a v e z c o n mayor acierto, a los miembros idóneos de la Junta Nacional de Justicia. Esta debe empezar sus funciones lo antes posible. La reforma del sistema de justicia es un imperativo.
Fuente: Magistrado
