La adaptación al trabajo remoto en numerosas empresas se ha realizado de forma acelerada debido a los cambios que trajo la pandemia del COVID-19. A pesar del avance logrado en este proceso, persisten dificultades entre los equipos de trabajo para mejorar el manejo de sus tiempos y lidiar con el estrés. Ante ello, el ABC del Seguro de Pacífico brinda algunos consejos a las empresas para ayudar a los trabajadores a manejar sus tiempos y liberar su estrés, sin generar un alto costo.
Límites claros: una de las herramientas que ayudaron mucho con la comunicación por su inmediatez fue el Whatsapp. Sin embargo, deben estar claros los límites horarios, para no afectar la vida personal y siempre mantener un tono cordial para no generar incomodidad.
“En nuestro caso, a través de las Buenas Prácticas de Clima, vimos que es más efectivo que sean los mismos integrantes los que creen sus propios límites, para que sea algo adecuado a la personalidad que tienen como grupo”, dice Carlos Ruiz, gerente de Gestión y Desarrollo Humano y Administración en Pacifico Seguros.
Solo reuniones necesarias: aunque ahora es fácil organizar una reunión por Zoom, esto no implica que toda coordinación deba necesitar una. En la medida de lo posible, debe realizarse cuando se necesite que todos los convocados tomen participación. Además, es recomendable no excederse de los 50 minutos. Teniendo esto como meta, podrán ser más eficientes y delegar próximos pasos.
Beneficios: En esta coyuntura en que se puede salir poco de casa y se trata de ahorrar, es una buena práctica ofrecer algunos beneficios a los trabajadores, ya sea desde precios módicos para compras (mediante acuerdos con los proveedores, por ejemplo) hasta recomendaciones o descuentos en restaurantes por delivery, e incluso ferias virtuales si se cuenta con la plataforma adecuada.
La relación de equipo: a diferencia del trabajo presencial en el que se almorzar o tomarse un café y aprovechar unos minutos para conversar con el equipo, ahora, con cada uno desde casa, se deben buscar otras alternativas.
“Es recomendable programar un momento en la semana para que el equipo pueda conversar sobre sus familias o intereses comunes. Si se complica dedicar una reunión completa, también es posible hacerlo al menos unos 15 minutos antes de empezar una reunión de trabajo, así empezamos con un buen ambiente”, comenta Ruiz.
Viernes de cierre: a veces se acumulan pendientes que no se logra completar. Una alternativa que propone Ruiz, y que se viene aplicando en Pacífico, son los #ViernesLibredeReuniones. “Lo que propusimos es que dediquemos la tarde de los viernes a cerrar los pendientes que pueden haber quedado a medias, como realizar cursos, encuestas, presentaciones, informes y otras pequeñas tareas, de modo que el fin de semana podamos enfocarnos en nuestra familia”, explica.
“Esta pandemia cambió cómo trabajamos y muchas empresas manejarán conceptos híbridos en adelante, abrazando el home office como una práctica permanente. Por ello, se debe trabajar en mantener la cercanía y un buen uso del tiempo, y no sólo por trabajo, sino porque existe un interés en su bienestar personal y familiar”, concluye Ruiz.
Fuente: Gestión
